Desarrolla tu plan de #negocio

Mundo Express

Pedro León

Patrimonio

Antes de arrancar, debes responder: ¿qué hace que mi producto o servicio sea único?, ¿qué necesidades del cliente cubre? y ¿cómo voy a lograr posicionarlo ante la competencia?

Si estás próximo a abrir tu empresa, lo primero que tienes que tener en cuenta es que debes elaborar un plan de negocio. Y es que uno de los errores más frecuentes de los emprendedores al iniciar su negocio es que no tienen por escrito cuáles son sus objetivos, en qué consiste la empresa y no vislumbrar resultados alcanzables.Entre las ventajas que representa tener este plan, se encuentra evitar el desperdicio de recursos en pago de rentas, salarios y materias primas que se adquieren “por intuición”, ya que el plan ofrece indicadores de desempeño para corregir el rumbo o, en el peor de los casos, cancelar el proyecto a tiempo para no perder más dinero.

 

 

Las principales puntos a analizar son los siguientes:

  • Resumen ejecutivo: En este rubro debes considerar el nombre de tu empresa, y señalar de forma sencilla el giro del negocio. Asimismo, debes incluir la misión, que es el propósito de la existencia de tu negocio, la visión, que es la proyección de tu empresa a futuro y los valores, que son las reglas bajo las cuales se conducirá tu compañía. Además es necesario incluir las necesidades financieras, es decir, qué capital requieres para iniciar el proyecto, la posición actual de tu negocio, así como los propietarios y los socios de igual forma, incluye los mayores logros obtenidos. Por ejemplo, si cuentas con alguna patente o has desarrollado prototipos novedosos de tu producto. Fortalezas y debilidades: Se conoce como la estructura del entorno, en este rubro debes de llevar a cabo un análisis de las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de tu empresa (FODA). De esta forma podrás conocer los puntos fuertes de tu negocio, y saber en qué áreas debes trabajar más de acuerdo a la competencia que exista en el mercado. Después deberás definir tu público meta, es decir, a quién está dirigido tu producto o servicio y saber con qué frecuencia se adquiere. Esto te ayudará a calcular el tiempo para completar tu ciclo de venta y estudiar detenidamente a tus competidores. Estrategias de operación: Aquí debes incluir los planes de distribución de tu producto, ventas, mercadotecnia, y publicidad. Debes enlistar cuidadosamente qué actividades llevarás a cabo para dar a conocer tu empresa y los productos o servicios que ofrezcas. De la misma manera incluye el precio de tu producto o servicio, si contarás con sistemas o esquemas de pagos diferidos o crédito dependiendo de qué sea lo que lances al mercado. Crea también una fuerza de ventas para que tu producto cuente con canales de distribución y comunicación para determinar los medios a través de los cuales tus clientes tendrán acceso a tu oferta. Estructura financiera: Esta es una de las partes fundamentales de tu plan de negocio, ya que es la que demostrará si tu idea es viable y si existe la posibilidad de que tú negocio se convierta en una empresa exitosa. Deberás realizarla con ayuda de un contador, en caso de que no cuentes con los conocimientos necesarios para hacerla. De igual forma elabora un estado de resultados, y revisa el flujo de efectivo. Esto proyectará a futuro la situación económica de la empresa. Después deberás de hacer un análisis del punto de equilibrio, que es la ?medida? que indica cuántas unidades de tu producto o servicio debes vender para que la empresa cubra los costos fijos de su propia operación.
  • Recursos humanos: Define la estructura organizacional de tu empresa o negocio. Incluso si es familiar cada quién debe tener un rol asignado en el cual se determinen las funciones y obligaciones que debe cumplir. Delimita los sueldos de tus colaboradores y si en un principio no cuentas con un gran capital para ello, también puedes ofrecer bonos por puntualidad, por buen desempeño o por trabajo en equipo.

Pon orden en tus finanzas

1.- Primero el ahorro: Puedes fijar un porcentaje de tu salario para el ahorro, la clave está en apartarlo siempre antes de realizar tus demás pagos, y guardarlo en una cuenta de ahorro, fondo de inversión o similar; de esta forma, además de ahorrar, tu dinero puede, incluso, generar algún interés. No es necesario que destines una gran parte de tu sueldo, lo importante es la constancia en este ahorro.2.- Presupuesta: Elaborar un presupuesto realista sobre los ingresos y gastos de toda la familia es un reflejo de salud financiera, con la ayuda de esta planeación puedes determinar qué gastos son prioritarios y cuáles no. No se trata de privarse sino de medir tus posibilidades y trazarte metas inteligentes y realistas.3.- Administra tus deudas: Realiza una lista de cuánto y a quién le debes, desde hipoteca, tarjeta de crédito o créditos personales; así puedes fijar un plan de pagos con el que puedas ir cubriendo dichos montos de manera responsable; si es necesario, puedes hacer recortes en tus gastos cotidianos.4.- Cuida tus tarjetas: Una tarjeta de crédito puede ser una gran aliada para las finanzas si se usa de manera responsable. Recuerda que el crédito es un préstamo y no forma parte de tu ingreso, por lo que deberás cubrir los pagos en tiempo y forma.

5.- Prevé emergencias: Los imprevistos pueden lastimar gravemente al bolsillo, lo más recomendable es tener un fondo para este tipo de eventos. Ya sea por la pérdida del empleo, situaciones de salud o accidentes, mantener un capital extra, que puede ser de uno a tres meses del sueldo como recomendación, es una ayuda para afrontar estas situaciones sin desestabilizar las finanzas ni tener que recurrir a un préstamo.

http://www.boletinamf.org.mx/AMF_24ENE13/franquicias.htm#Franquicias_3

7 #estrategias de #exportación para las #Pymes

Publicado por Blanca Betan el Miércoles 16-01-2013

CIUDAD DE MÉXICO.- En México es cada vez más común encontrar emprendedores que han decidido formar una empresa, en muchas ocasiones su iniciativa y tenacidad los ha llevado a ser exitosos y crecer hasta el punto en que su producto o servicio los empuja a explorar nuevos mercados, incluso a ir más allá de sus fronteras.

Lo que parecería una enorme oportunidad, se puede convertir en un infierno si no están bien preparados para entrar en un mundo de datos y recovecos que los pueden perder en el camino.

Si eres un emprendedor y quieres dar pasos firmes en este terreno, te dejamos siete estrategias de exportación:

1.- Pregúntate si realmente tu producto o servicio está listo para ser exportado.

Debes realizar un análisis minucioso de sus Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas, (FODA). Tras este primer paso debes analizar la competencia, los productos que existen en el mercado a donde piensas exportar, cuestiónate con honestidad ¿Quién va a comprar mi producto y por qué?

Además, es el momento de responder a esta cuestión ¿Tengo las habilidades y los recursos para comenzar con la exportación de mi producto?, ¿Cuál es el plus que tiene mi producto en relación con los otros?

Investiga a fondo el mercado, haz un plan de marketing internacional y reúne el capital suficiente para solventar todos los gastos que se te vienen encima.

2.- ¿Conoces a la perfección el mercado a donde quieres llegar?

Analizar a tu competencia sólo es el principio de un mundo de detalles que no puedes pasar por alto, no olvides revisar los precios del mercado. ¿Mi producto es competitivo, es innovador?, revisa el diseño de los productos que son con los que te enfrentarás, qué tipo de presentación domina en el mercado, cual es el precio y la calidad, quién lo certifica. Investiga si tiene algún significado peculiar el nombre de tu producto en ese país, a veces los nombres son sinónimo de un asunto negativo, una frase o un número puede estar rodeado de supersticiones que para el país tienen mucho peso. El color de tu envasado también tiene todo un lenguaje, por ejemplo colores como el negro o el morado tienen mucho peso ideológico en ciertas culturas.

3.- El trámite aduanal, un punto medular.

En caso de no contar con un buen agente aduanal, todo tu plan se puede venir atrás.  Asesórate. Verifica si existe ayuda gubernamental a la venta de productos importados o por el contrario si existen barreras que te impedirán desarrollar tu negocio. El etiquetado de tu producto debe ser absolutamente claro, no dejar huecos que podrían causarte retrasos en la aceptación del mismo. Checa si es necesario hacer etiquetas bilingües ya que algunos países tienen como lengua principal dos idiomas. Agrega en el etiquetado las diversas aplicaciones del producto.

4.- Detalla aún más

¿Cuál es tu mercado objetivo? ¿Cuáles son las tendencias económicas en ese país?
Detalla el perfil demográfico y la cultura de masas que prevalece en el presente y crea una perspectiva a corto, mediano y largo plazo. Para entonces ya debes haber realizado una consulta con clientes potenciales, un acercamiento con mayoristas, incluso ponerte en contacto con personal de la embajada. Entérate en qué gasta la gente su tiempo en esa región, cuáles son sus comidas y pasatiempos favoritos, dónde hace sus compras, con que productos limpia su casa, etc.

5.- Prepara el primer paquete que exportarás.

¿Conoces si existe algún tratado comercial entre tu país y el lugar a donde piensas introducir tu producto o servicio?, entérate si existe algún tipo de restricción, ten cuidado con el clima del país o la región donde llegarán tus productos, recuerda factores como la humedad, el frío extremo o el calor que podría dañar tu mercancía.  Cerciórate si debes considerar un empaque especial, un servicio postventa. Planea con tiempo si requieres asistencia financiera.

6.- Define el plan de exportación.  

Revisa el volumen de lo que vas a exportar y los precios del mismo, a veces es mejor enviar un volumen enorme para reducir costos o bien en ocasiones eso elevará tus gastos, define a través de que medio te conviene más enviar tus productos: vía aérea, marítima, carretera, etc. Si vas a ofrecer una garantía de tu producto o servicio, define adecuadamente los límites y alcances.

7.- No olvides mantener el contacto con clientes potenciales.

Es muy importante haber vivido en el país donde piensas exportar tus productos o servicios, pero en caso de no haberlo hecho ponte en contacto con personas de ese país, pídeles informes detallados de los productos con los que compites, las redes sociales son una excelente alternativa y no gastarás mucho dinero.  Hazlo muy regularmente pues los gustos, modas y tendencias cambian constantemente.

Cuéntanos ¿Cuál es tu experiencia al exportar?

http://www.dineroenimagen.com/2013-01-16/14444